Por activa y por pasiva, nos quedó bien claro: la protección solar es fundamental. Los especialistas recomiendan el uso del protector solar al menos cada 2-3 horas ante la exposición directa al sol, pero la mayoría de las personas no utilizan protector, ya que lo consideran muy grasoso, difícil de re-aplicar sin quedar blanco o les arde en los ojos.
Los formatos para crear el escudo protector en nuestra piel son variados, siendo las cremas solares las más utilizadas. Si en los últimos años la revolución fueron los aerosoles y difusores 360º para el cuerpo, el avance imparable de la ciencia en temas de protección añadió al mercado los solares en polvo, que no dejan la cara grasa ni blanquecina.
El polvo con SPF (factor de protección solar) crea un bloqueo físico sobre la piel que la protege de los rayos UV y no permite que éstos penetren.
Lo podés utilizar en rostro incluyendo párpados, cuerpo, cuello, escote, brazos, hombros hasta el cabello. Así es, el cuero cabelludo es la parte que a menudo descuidamos y que en ocasiones puede llegar a arder debido a las quemaduras solares.
Además de contribuir a minimizar las pequeñas imperfecciones, proporciona protección completa en zonas que con otros formatos quedan descubiertas, como el área alrededor de la nariz.
Algunos de los polvos del mercado son traslucidos o sin color, y dejan la piel con una apariencia natural, pero también existen en diferentes tonalidades.
Paso a paso
Acá te proponemos una rutina de belleza diaria para usar un protector solar en polvo como base antes del maquillaje:
1- Limpiá tu piel diariamente
La rutina de limpieza es fundamental para tu cutis, más allá de que te maquillés o no. Es muy importante usar productos que sean específicos para tu tipo de piel.
2- ¡No te olvidés de tonificar!
La tonificación es fundamental para completar la rutina de limpieza equilibrando la hidratación. En este paso retiramos las células muertas, lo cual permitirá que la crema hidratante se absorba mejor en la piel.
3- Hidratá tu piel
Cuando tu piel está hidratada luce más fresca, luminosa y el maquillaje dura más tiempo. Para ello es necesario que apliqués un gel, emulsión o crema hidratante que sea específica para tu tipo de piel.
4- ¡Aplicá protector solar en polvo!
Recordá que el protector solar puede ser el mejor antiage para que tu piel luzca fresca, joven y saludable por mucho más tiempo.