El temporal de principios de semana provocó grandes daños en la zona de Ciudad Universitaria y el Predio UNL-ATE. Los fuertes vientos, que alcanzaron 107 km/h dejaron columnas de iluminación y árboles caídos, se volaron techos y se rompieron carteles y vidrios.
Ante esta situación, y desde las primeras horas de producida la tormenta, el equipo de Obras y Servicios de la casa de estudios ya se encuentra trabajando para reparar las instalaciones.
El director de Servicios de la UNL, Enrique Carbajo dijo por LT10 que "la tormenta fue muy fuerte, se sintió tanto en la parte edilicia como en la arboleda. Hay más de 40 árboles caídos y de la parte edilicia hemos recuperado más del 90%. Trabajamos mucho en la parte de parquizado y ahora estamos en la parte del predio viendo como recuperamos el arbolado".
En tanto, remarcó que "la seguridad de la gente es muy importante, por eso habilitar el predio para las miles de personas que vienen acá sería muy peligroso".