Francia padece una nueva ola de atentados terroristas protagonizados por fanáticos religiosos islámicos. Esta ola de ataques se da en el marco de una tensión política que impulsa Erdogan contra el presidente francés (que simboliza los ideales de la república europea).
Todo comenzó con el brutal crimen al profesor francés que estaba dando clases de libertad de expresión con las caricaturas de la revista satírica francesa Charlie Hebdo. Luego de este episodio, el presidente francés participó de un homenaje en la Soborna defendiendo la libertad de expresión. Macron reivindicó la libertad de expresión como un derecho fundamental de la sociedad libre.
En respuesta a esto, Erdogan, presidente de Turquía, encabezó una ofensiva verbal y económica contra Francia, al convocar a todos los musulmanes del mundo a no comprar productos franceses. A este boicot adhirieron otros países musulmanes como Qatar, Libia y Jordania y líderes de Irán y Malasia.
Claudio Fantini, analista internacional de LT10, sostuvo que “a mi entender, este ataque es contra el ideario del estado francés. El estado que preside Macron es hijo de la revolución francesa y el iluminismo. Es el Estado cuya constitución es un modelo de laicismo. Por lo tanto, embestir contra Francia es hacerlo contra la secularidad”.
Además, Claudio Fantini agregó que “Turquía, de la mano de Erdogan está dejando atrás 100 años de secularidad (desde la revolución de Atatur). Hoy está virando de una forma muy abrupta con Erdogan y sus ínfulas otomanas. Este dirigente turco tiene el discurso de una cruzada islámica”.