La campaña de vacunación contra el coronavirus en Lombardía, la región más rica de Italia y la más golpeada por la pandemia, es "un caos" en la que "las cosas no funcionan", según las definiciones de la prensa italiana y la vicepresidenta de la región.
"Vacunas en Lombardía: otro día de caos", tituló hoy el diario Corriere luego de las fallas del fin de semana en el plan para aplicar las vacunas a las personas mayores de 80 años que integran el grupo que recibirá el fármaco durante marzo.
Según informó este lunes la cadena pública RAI, uno de cada tres mayores de 80 años aún no fue convocado en la Lombardía para recibir la primera dosis de la vacuna, dentro de la campaña de vacunación que el Gobierno inició el 27 de diciembre del año pasado.
Los atrasos en la aplicación de las vacunas, según denunció en la red Twitter la vicepresidenta regional Letizia Moratti se deben a la gestión de AIRA, la empresa regional creada en 2019 para centralizar las compras y el reparto de turnos para trámites, incluida la vacunación.
"Para la buena continuidad de la vacunación las cosas que no funcionan deben cambiarse, y en ARIA hacen falta decisiones rápidas y drásticas. Los ciudadanos no deben pagar la ineficiencia de la burocracia", planteó Moratti.
Las demoras en la región se dan cuando Lombardía concentra 29.799 de las 104.942 víctimas totales de Italia por coronavirus desde el inicio de la pandemia y cuando ayer informó 4.003 de los 20.159 nuevos casos a nivel nacional.
"La insuficiencia de ARIA, incapaz de gestionar las reservas decentemente, ralentiza el esfuerzo conjunto para vacunar. ¡Es inaceptable!", insistió Moratti.
Hasta el momento, Lombardía suministró el 78,3% de las vacunas que recibió, según el monitoreo en tiempo real del sitio web del Gobierno dedicado a la campaña de vacunación, por debajo de la media nacional de 81.9%.
Con fuertes restricciones a la movilidad interior al menos hasta el 6 de abril, nueve regiones de Italia y una provincia autónoma están catalogadas como "zona roja" o de máximo riesgo epidemiológico.
Otras diez regiones y una provincia autónoma permanecen como "zona naranja", de riesgo medio-alto.