El cadáver de Lautaro Rosé, el joven de 18 años que estaba desaparecido desde el lunes último en la ciudad de Corrientes cuando se arrojó a las aguas mientras era perseguido por la Policía, fue hallado este miércoles en el río Paraná, en cercanía de los astilleros, y por el hecho fueron separados preventivamente de sus cargos tres efectivos de la comisaría local que participaron del procedimiento.
El abogado que representanta a la familia Rosé, Hermindo González, confirmó el hallazgo del cadáver, que esta tarde era sometido a una autopsia para determinar las causas de la muerte, y pidió a la Justicia que el caso sea investigado como un "homicidio calificado".
Esta diligencia se llevaba a cabo en la sede del Instituto Médico Forense, dependiente del Poder Judicial provincial, y con un perito de parte propuesto por los familiares de la víctima.
"Hay testimonios que acreditan que Lautaro pedía auxilio cuando estaba en agua, porque no sabía nadar, y los policías que estaban allí lo vieron y no lo socorrieron", explicó a Télam el letrado, integrante de la organización de Derechos Humanos "Marcha Provincial por Justicia".
Y luego manifestó que "está plenamente acreditado que Lautaro y su amigo fueron perseguidos 500 metros a los tiros con balas de goma".
Mediante un comunicado, el Ministerio Público Fiscal de Corrientes informó que la desaparición del joven se produjo tras incidentes en la costanera, debajo del puente General Belgrano, la madrugada del pasado lunes, donde "actuaron efectivos de la Policía de Corrientes y no se labraron actuaciones".
Por tal motivo, señalaron las fuentes, "se trataría de un procedimiento irregular" respecto de la actuación policial.
De acuerdo al comunicado, en el lugar donde se inició el hecho "se generó un incidente e intervino personal de la Policía de Corrientes, lo que derivó en un tumulto de personas y corridas".
"Allí, Lautaro Rosé junto a un menor de edad que lo acompañaba, se arrojaron a las aguas del río Paraná", indicó el escrito, en el que se aclaró que "luego, el menor de edad salió del agua, pero no así Lautaro".
Ayer, ministro de Seguridad de Corrientes, Juan José López Desimoni, informó que tres funcionarios policiales fueron apartados preventivamente de sus funciones mientras avanza la investigación.
El cuerpo de Lautaro fue divisado este miercoles por la mañana en el río por pescadores malloneros, quienes dieron aviso a efectivos de la Prefectura Naval Argentina, que lo retiraron de las aguas.
Los voceros precisaron que el joven desapareció en la zona de la playa Arazaty, en la costanera de la capital de Corrientes, y que su cuerpo fue encontrado en cercanías de los astilleros.
El abogado de la familia adelantó que solicitarán que la investigación del hecho la lleven adelante efectivos de fuerzas federales y que la causa sea caratulada "homicidio calificado".
Por su parte, Luis, tío de Lautaro, dijo que esperan los resultados de la autopsia para saber si su sobrino fue golpeado o si tiene perdigones.
"El fiscal me pidió todas las fotos que tenga y mis hermanos del cadáver. Me dicen que tenía heridas, estaba muy golpeado pero no se confirma si tenía balazos o no, puede que sean perdigones, no se sabe", dijo en declaraciones al canal C5N.
"Pido que se aclare porque estoy sospechando que fueron policías", agregó, tras lo cual calificó a Lautaro como un chico "buenito, amable" que "no era un chorro e iba a la escuela".
Mientras que la tía del joven fallecido, Natalia Rosé, dijo antes de la aparición del cuerpo que el amigo de su sobrino "aseguró que fueron golpeados por la Policía", aunque "no quiere hablar más porque tiene miedo".
Lo mismo había dicho ayer la madre de Lautaro, Juana Sotelo, quien aseguró a medios de prensa que el amigo le comentó que "fueron golpeados y perseguidos por la Policía, en medio de la noche".
A su vez, el fiscal Gustavo Robineau, que investiga el hecho, dijo a Télam que se trabaja "en la individualización de los efectivos policiales que intervinieron" en el hecho.