Enzo Roldán fue una de las importantes apariciones de Unión en la recta final de temporada. Si bien es cierto que estaba desde comienzos de año, recién con el interinado de Marcelo Mosset tuvo su chance y no la dejó pasar. Ya con Gustavo Munúa al frente mostró su pico de rendimiento como volante interno. Esto deparó en que se hicieran gestiones para que continúe, ya que su contrato expira el 31 de diciembre.
La secretaría técnica rojiblanca no durmió y rápidamente entabló conversaciones con Boca, dueño del pase. Desde ya, no se tienen los 2.000.000 de dólares de la opción por el 50% estipulada con antelación, pero se hizo una contraoferta. Por lo que reveló Diez en Deportes días atrás, sería por una nueva cesión, pero con un cargo de 50.000 dólares y una posibilidad de compra por la mitad de la ficha en 500.000 dólares.
En Unión esperan por saber si se acepta esta idea en Boca, que prefiere resolver esto por tener otras negociaciones como prioridad. Roldán, que dejó en claro que quiere quedarse en Santa Fe, no estaría en los planes de Sebastián Battaglia y eso le abre la puerta. Pero cuando se trata de dinero, nada suele ser tan sencillo.
El deseo es que termine siendo un regalo por el Año Nuevo. Solo resta ver cómo termina esta historia.