Colón consiguió el gran objetivo de meterse en los octavos de final de la Copa Libertadores como puntero de su Grupo G, más allá de perder frente a Peñarol por 2-1 en el Campeón del Siglo de Montevideo.
Al primer lugar lo pudo conservar como consecuencia que Olimpia le ganó a Cerro Porteño, y si bien no le alcanzó para seguir en la Libertadores, lo dejó a su clásico rival sin chances de ser líder de la zona y se metió en Copa Sudamericana.
Pero a Colón le costó muy caro la decisión de Julio Falcioni de incluir entre los titulares a Rafafel Delgado, Federico Lértora y Rodrigo Aliendro, quienes arrastraban dos amonestaciones. Es que el lateral izquierdo vio otra amarilla y deberá purgar una fecha de suspensión, que será en la ida de los octavos de final, en tanto que los volantes, cuyo futuro en el club es incierto, salieron inmunes.
Sin embargo, hubo otra situación que dejó muy preocupado a Julio Falcioni y tiene que ver con los estados físicos de Facundo Garcés y Paolo Goltz, quienes fueron reemplazados con sendos inconvenientes físicos.
El defensor santafesino salió con una molestia física, e incluso se pudo observar cómo lo atendían los médicos durante el parate por los disturbios en la tribuna, mientras que el entrerriano salió con un inconveniente físico más grave, ya que se habla de una lesión en los aductores.
Además, Lucas Beltrán habría jugado su último partido en Colón, ya que River haría uso de la opción para repatriarlo, en tanto que lo mismo podría haber ocurrido con Lértora, Aliendro y Christian Bernardi, a quienes se les vence el contrato el próximo 30 de junio.