Publicar solo para tener éxito
Es indudable que las redes sociales pueden traer muchos beneficios y que nos pueden permitir convertimos en personas a las que siguen mucha gente, es decir, podemos llegar a tener, lo que para muchos es el éxito.
El problema es que esta obsesión por el éxito provoque que solamente hagamos contenido buscándolo de la manera más rápida posible, intentando que nuestras publicaciones o se conviertan en virales de la noche a la mañana.
Si todo se logra de manera orgánica, el hecho de ser viral traerá muchísimas ventajas, la principal el aumento de los seguidores. El problema es que no se pueden hacer vídeos intentando esa viralidad a toda costa, porque al final se caerá en la imitación o en contenidos nada naturales.
Contenido que no interesa
Cuando ves en cualquier blog o vídeos de YouTube sobre consejos para funcionar en Instagram, una de las primeras normas que todos te dicen es la de publicar los más a menudo que se pueda.
No decimos que no tengan razón, ya que es una buena forma de competir con otras cuentas de Instagram, pero siempre que el contenido sea interesante.
Si publicamos por publicar, es decir, como toca una publicación, subimos cualquier contenido, aunque no sea de calidad o no sea lo que explícitamente vemos que le interesa a la audiencia, perderemos algunos seguidores casi seguro.
Videos mal recortados
Aunque no te lo creas, colgar en Instagram vídeos mal recortados es algo muy habitual, mucho más de lo que te imaginas.
Si lo subimos directamente del teléfono tendremos muchas posibilidades de que esté bien en cuestión del formato (16:9), el problema es cuando utilizamos un video que hemos hecho con otro medio, ya que muchas veces están grabados de otra manera.
Además, ver como alguien se enfoca a sí mismo y parte de su cara no se ve, es algo muy usual.
Mal enfocado
Otra de los fallos que se suelen repetir en lo que es la técnica de los vídeos es que no están bien enfocados, lo que hace que la calidad de la imagen baje muchos enteros.
Este tipo de vídeos hace que se pierdan seguidores o al menos que no se ganen, puesto que no gustan, provocando menos interacción con el canal.
Soluciones a los problemas
Contenido para tus seguidores
Lo primero es dejar de pensar en si nos hacemos virales o no, es algo que no debe importarnos y que debemos dejar en un segundo plano totalmente.
A partir de ahí debemos contar historias que sean originales y que hagan que nuestros seguidores sientan que las hacemos por y para ellos, sin tener en consideración segundas intenciones y poniendo toda nuestra capacidad en que le llegue aquello que decimos.
Contenido relevante
Debemos hacer que nuestro contendido sea relevante y si para eso tenemos que pensar durante unos días cuál será nuestro próximo vídeo, pues que así sea.
Es decir, si por publicar a menudo, el contenido baja de calidad y deja de ser interesante, es mejor parar, reflexionarlo y después colgar aquello que consideremos que a nuestra audiencia le va a interesar y gustar.
El recorte
Debemos asegurar que el recorte es el adecuado para el lugar donde vayamos a colgar el vídeo dentro de Instagram.
Si lo hacemos en las Stories, debemos recordar hacerlo en 9:16, mientras que si hacemos una publicación regular tenemos más flexibilidad, puesto que podemos usar un 4:5 (si es más bien vertical) o 1:1 (cuadrado), aunque el más aconsejable, porque es el que mejor queda, es el 16:9.
Puedes servirte de algún software para recortar y lograr estos formatos o estar atento a grabar directamente en ellos, y a poder ser, con un trípode, algo que te ayudará para que se te vea la cara entera sin problemas.
Calidad de imagen
Si tu smartphone no da la calidad deseada en los vídeos, la inversión en una cámara podría ser la mejor solución, ya que las hay a buen precio y que otorgan suficiente perfección de vídeo.
De todas formas. si grabas con el smartphone, puedes servirte de alguna aplicación para el móvil que mejore tus vídeos, porque muchas veces la app que trae de serie no está demasiado lograda. Te aconsejamos que busques una que te permita poner el enfoque fijo y así no sufrir de partes del vídeo donde se vea borroso.
Estos son los principales problemas de los vídeos de Instagram y sus soluciones, por lo que, a partir de ahora, si cometías alguno de ellos, ya puedes arreglarlo y comenzar a subir como la espuma dentro de esta red social.