Hace algunos días, mientras se estaba realizando una ceremonia de sepelio comenzaron a caer piedras desde el exterior e incluso alguno de los agresores intentaron ingresar al cementerio.
Horacio Roitman, presidente de la DAIA Santa Fe contó que "por suerte no tuvimos que lamentar víctimas, pero una cosa así es completamente inédita y muy peligrosa. De haber pegado alguna de esas piedras sobre los participantes del sepelio, deberíamos estar hablando en otros términos".
Según el presidente de la DAIA Santa Fe, en el cementerio israelita hay seguridad y fueron ellos quienes impidieron que los agresores entren al predio. "Ya hemos naturalizado, lamentablemente, el robo y profanación de las tumbas, pensando en que nadie sale lastimado", agregó.
Desde DAIA Santa Fe piden a las autoridades que participen en la investigación para que se puedan esclarecer los hechos.