El español Rafael Nadal anunció que no jugará el Masters 1000 de Montecarlo, lo que generó que crezcan las dudas sobre su futuro como profesional.
El español comunicó la noticia en un posteo en sus redes sociales, donde reconoció que no va a disputar el torneo porque “simplemente mi cuerpo no me deja”, y añade: “Aunque sigo trabajando y esforzándome al máximo cada día con la ilusión de poder competir en torneos que han sido muy importantes para mí, la realidad es que a día de hoy no puedo”.
La Fiera de Manacor jugó su último partido a principios de enero, cuando perdió en los cuartos de final del ATP 250 de Brisbane. Pero luego se perdió el Abierto de Australia por una lesión en la cadera y los Masters 1000 de Indian Wells y Miami por problemas en la espalda.
Aparentemente esta última lesión aún sigue afectando en su rendimiento, por lo que el ex N°1 del mundo y ganador de 22 títulos de Grand Slam decidió bajarse del primer torneo que tenía anotado en la gira de polvo de ladrillo.
Este es un gran golpe para Nadal, que no podrá disputar el torneo que ganó en 11 ocasiones (de 2005 a 2012 y de 2016 a 2018).
Probablemente el retorno del español se de en el ATP 500 de Barcelona (se juega entre el 15 y el 21 de abril) o el Masters 1000 de Madrid, que se desarrollará entre la última semana de abril y la primera de mayo.
La gira de polvo de ladrillo le sirve de preparación a todos los jugadores para el plato fuerte en esta superficie, Roland Garros, donde Nadal demostró un dominio absoluto a lo largo de su carrera, quedándose con el torneo en 14 ocasiones (2005, 2006, 2007, 2008, 2010, 2011, 2012, 2013, 2014, 2017, 2018, 2019, 2020 y 2022).
Esta temporada podría marcar un punto final para la carrera de Nadal, que se vio severamente afectado por las lesiones principalmente en los últimos años.