El huracán Beryl se fortaleció a categoría 5 este lunes, convirtiéndose en potencialmente catastrófico, en la medida que avanzaba por el Caribe Oriental el lunes por la noche hacia Jamaica, tras derribar líneas eléctricas e inundar las calles de otras islas.
Beryl marcaba un comienzo inusualmente violento y prematuro de la temporada de huracanes en el Atlántico de este año, y los científicos argumentan que el cambio climático probablemente contribuyó a la rapidez con la que se formó la tormenta.
El fenómeno recogía vientos cercanos a los 260 kilómetros por hora y se situaba algo más de 1300 kilómetros al este-sureste de Kingston, la capital de Jamaica, según el Centro Nacional de Huracanes (NHC) de los Estados Unidos. El huracán es ahora "potencialmente catastrófico", informó el NHC, apuntando que "podría traer vientos potencialmente mortales y mareas ciclónicas a Jamaica esta semana".
El lunes temprano, se vieron vehículos circulando por el paseo marítimo inundado en Bridgetown, Barbados.
En la comunidad de Prospect en San Vicente, los informes de daños incluyeron techos arrancados de edificios, así como cortes de energía en otras partes de la isla.