El intendente de Coronda, Ricardo Ramírez, junto a la vicegobernadora Gisela Scaglia, se reunieron este miércoles por la tarde con funcionarios nacionales para evacuar dudas sobre la futura instalación de la cárcel federal en esa localidad.
En la oportunidad, pidieron precisiones sobre distintas cuestiones del penal, cuya apertura está prevista para fin de año y en dos meses ya comenzaría a arribar el personal.
En ese sentido, indagaron sobre el perfil de los 486 internos que albergará, y otros detalles que pueden generar inconvenientes en los corondinos.
Por LT10, el intendente Ricardo Ramírez explicó que las consultas fueron para brindarle seguridad a los vecinos, ya que "es una cárcel que trae sus inconvenientes, sobre todo con las visitas".
En tanto, Ramírez indicó que la preocupación también pasa por la infraestructura y servicios, más allá del penal, en materia de movilidad, vivienda y transporte en la ciudad.
El mandatario municipal remarcó a su vez el acompañamiento del gobierno provincial, y afirmó que recibieron un núcleo de 44 cámaras de seguridad.
Finalmente, destacó la importancia de esta primera reunión con autoridades nacionales, y la semana que seguirán avanzando en algunos puntos con prioridades y otros a resolver.