Este martes se terminaron de acordar los números con Rodolfo De Paoli para la rescisión del contrato que tenía firmado hasta diciembre. Una decisión que la dirigencia que tomó el lunes pasado por la falta de los resultados esperados, más allá de la postura del técnico, que adujo tener el respaldo de los jugadores.
Sin embargo, las urgencias primaban y se fue al hueso con la determinación. Ahora se están analizando opciones para reemplazarlo mientras Martín Minella asume de manera interina. Un escenario impensado hace dos meses atrás, donde el Sabalero peleaba bien arriba y ahora está más cerca de quien lo persigue en el último lugar del Reducido.
Igual, matemáticamente puede aspirar todavía al primer lugar, pero debería ganar todo lo que le queda, algo utópico por lo mal que le viene yendo de visitante. Eso sí, para las arcas es un dolor de cabeza, ya que se tiene que pagar otro vínculo, porque el inicial es el de Iván Delfino, que también fue cesanteado por más que se aclaró que fue de común acuerdo.
Es decir, Colón terminaría el campeonato, de mínima, pagándole a tres entrenadores: los dos que se fueron y el que vendrá. Cosas que las que se deben lidiar en tiempos donde encima el dinero no es lo que sobra.