"Estábamos esperando esto", dijo ya dos veces el DT de Colón, Ariel Pereyra, ante la ausencia de victorias en la Primera Nacional. El primer bache de tres fechas ya sin ganar que relegó al Sabalero al séptimo lugar del grupo B, por lo que el ánimo de la gente ya no es el mejor.
Sobre todo por lo que transmite el equipo dentro del campo de juego. En algunos casos, no brindando confianza y por eso, para muchos habrá más que solo tres puntos en juego el lunes que viene ante San Telmo en el Brigadier López. Sobre todo, porque ya Pata es cuestionado por la gente, en lo que asoma ser ya un examen a rendir.
Quizás para otros suene exagerado, porque el torneo recién está arrancando, pero por la relevancia que tiene Colón, estar en este tipo de rachas genera dudas. Ni hablar con la necesidad de ser protagonista para buscar el ascenso y, tras un inicio aceptable, de golpe el rendimiento se viene en declive. Por eso no sorprende el lugar en la tabla, lo que hace ruido.
Con todos estos condimentos, Pereyra sabe que tiene una semana de tensión por delante para preparar el cotejo ante el Candombero, donde pasó a ser imperioso sumar de a tres. Un poco para retomar la confianza y por otro, para salir de este pozo para que luego no sea más complicado salir.
Está el aprendizaje de la temporada pasada, donde nunca pudo salir y eso se terminó pagando caro.