La fecha de la ejecución de 8 presos de Arkansas , Estados Unidos, no tiene que ver con la gravedad de sus delitos o el tiempo que llevan en el "corredor de la muerte ". Simplemente, se relaciona a la fecha de vencimiento de las inyecciones letales con las que cuenta ese estado y que están por vencer en 11 días.
Ayer, dos de los hombres: Jack Jones y Marcel Williams fueron ejecutados con 3.13 horas de diferencia al recibir una dosis de la inyección letal, compuesta por: midazolam, que sirve para sedar al preso; bromuro de vecuronio, que paraliza el cuerpo; y cloruro de potasio, que detiene finalmente el pálpito del corazón.
Los dos formaban parte del grupo de ocho presos que el gobernador de Arkansas, del republicano Asa Hutchinson, pretendía ejecutar en un lapso de 11 días antes de que caduquen a final de abril las dosis de midazolam, un cuestionado sedante, difícil de obtener porque las farmacéuticas no quieren suministrarlo para la pena de muerte.
De momento, Arkansas ha acabado con las vidas de tres de esos ocho presos, cuatro han obtenido suspensiones temporales de la Justicia y un octavo, Kenneth Williams, aún puede ser ejecutado el próximo jueves por un asesinato en 1999 durante una fuga de la cárcel en la que cumplía condena por otro homicidio.
Williams fue el noveno reo ejecutado este año en Estados Unidos (Jones el octavo) y el 1.451 desde que el Tribunal Supremo reinstauró la pena de muerte hace cuatro décadas. Arkansas ha ejecutado a 30 de ellos. El récord lo tiene Texas con 542 ejecuciones.