Miles de ciudadanos, acompañados por todas las autoridades catalanas y españolas sin excepción, se unieron este viernes contra el terrorismo en el emotivo minuto de silencio que ha tenido lugar al mediodía en plaza Catalunya. Este punto neurálgico de la ciudad ha quedado abarrotado de gente y, tras el silencio, los asistentes han estallado con aplausos y al grito de “No tinc por!” (“¡No tengo miedo!”).
El ayuntamiento ha puesto cifras a la solidaridad. Unas cien mil personas han participado en la concentración, 30.000 en la plaza y unas 70.000 en las calles adyacentes. De hecho, la Rambla, escenario ayer del fatídico ataque, ha sido hoy lugar de concentración espontánea, una marcha que ha convivido momentáneamente con los turistas que sin miedo -aunque con un inusual silencio- han vuelto al paseo barcelonés.
Entre los asistentes a la concentración contra los ataques, primero en la Rambla, y de madrugada en la localidad turística de Cambrils (Tarragona), se han podido ver a representantes de todas las confesiones religiosas, incluida la musulmana, que ha querido estar presente para mostrar su repulsa por los ataques.
La policía catalana habían recomendado a los ciudadanos que quisieran participar en el acto de rechazo por los atentados de Barcelona y Cambrils que acudan a pie y que no lleven mochilas ni bolsas grandes.
El minuto de silencio ha sido respaldado en todos los municipios de España. La convocatoria en Madrid ha tenido lugar en la plaza de Cibeles, aunque también ha habido concentraciones en el Palacio de la Moncloa, el Congreso y el Senado. También los agentes sociales se sumaron a la convocatoria y han llamado a los trabajadores a secundar los actos.