Después de dos décadas de ausencia, la Fórmula 1 podría volver a hacer rugir sus motores en suelo argentino. Así lo dejó entrever el domingo Charlie Whiting , director de Carreras de la categoría, quien afirmó que si se hacen algunos trabajos en el Autódromo de Buenos Aires, la máxima categoría del automovilismo mundial podría retornar a nuestro país en 2019.
Luego del triunfo de Lewis Hamilton en el GP de Monza, Whiting brindó una entrevista con el canal F1 Latinoamérica, en la que reconoció que si en el Autódromo Oscar y Juan Gálvez de Buenos Aires se hacen algunos trabajos, el calendario 2019 de la F1 tendría un espacio para el GP de la Argentina.
La noticia tiene sustento e ilusiona a los fanáticos de los fierros. El máximo responsable de seguridad y deportivo en cada carrera de Fórmula 1 visitó la Argentina hace unas semanas, con motivo de los 1000 kilómetros de Buenos Aires del Turismo Carretera. Entonces, Whiting mantuvo varias reuniones informales sobre el tema y realizó un informe sobre el estado actual del autódromo, y sugirió qué cosas mejorar.
Según anticipó ayer el sitio notasdeactualidad.com, al Gobierno de la Ciudad le entusiasma la idea de repatriar a la Fórmula 1, por el potencial turismo internacional que traería de la mano y la difusión de la ciudad. Se estima que los trabajos costarían alrededor de 45 millones de dólares: lo que habría que establecer es de qué manera afrontar esa demanda, ya que no sería el estado quien la asumiría.
Las palabras de Whiting entusiasman a los miles de fanáticos que la Fórmula 1 tiene en el país. Esta vez, a diferencia de anuncios anteriores, la posibilidad está sostenida en una palabra oficial. Y va de la mano con una pretensión de Liberty, la empresa dueña de la categoría: darle más lugar a Latinoamérica en el calendario anual. En ese sentido, la Argentina tiene el valor agregado de la tradición automovilística, que ayuda a pelear por una plaza.