Un estudio realizado este año reveló que los usuarios de Tinder son propensos a revelar una mayor cantidad de datos privados. Judith Duportail, una periodista que escribe para The Guardian, se dispuso a averiguar todo lo que la plataforma sabe sobre ella.
En el mes de marzo hizo una solicitud a Tinder para poder acceder a esta información, ya que una ley de protección de datos europea permite a sus ciudadanos pedir a las compañías que les proporcionen todo lo que recopilan sobre ellos.
¿El resultado? 800 páginas repletas de información muy sorprendente:
- Los me gusta de su cuenta de Facebook
- Las fotos publicadas en su cuenta de Instagram, a pear de que desconectara la cuenta de Tinder
- Sus estudios
- Cuál es la edad que suele interesarle de los hombres
- Cuántas veces se ha conectado
- Dónde y cuándo tuvo las conversaciones en Tinder
"A medida que avanzaba por las páginas me fui sintiendo culpable. Estoy impresionada con la cantidad de información que he estado dispuesta a revelar".
Lo cierto es que uno no se quiere imaginar qué ocurriría si a Tinder le pasara lo mismo que a Ashley Madison en el año 2015. Si un grupo de hackers consiguiera acceder a la plataforma podría tener en su poder demasiados datos y de una importancia elevada.
Si leemos la política de privacidad de Tinder, ya nos dejan claro que "ningún sistema es completamente seguro". Debemos recordarlo cada vez que compartamos cierta información en plataformas de estas características.
Si Tinder tiene 800 páginas de un usuario promedio, imaginate la cantidad de páginas que generaría una solicitud a Facebook o a Google.