Casi todos y en mayor o menor medida existimos en Internet. Quién no tiene cuentas de correo como mínimo, mientras que otros tienen varias redes sociales y lo más osados tienen una gran parte de su vida publicada en blogs o vlogs que a su vez desparraman por toda la red de redes a través de mails, redes sociales y un largo etcétera.
La mayoría de los usuarios va dando pasitos de bebé en el mundo online, pasado de sólo un mail a un servicio de mensajería instantánea como WhatsApp y llegando a redes sociales o incluso canales de streaming de video como YouTube. Siempre se va para adelante, ¿pero se puede ir para atrás? ¿es posible ir tanto para atrás hasta desaparecer de la Internet? sí y no.
Software para escapar de la vida virtual
Existen varios servicios digitales que se dedican exclusivamente a borrar cuentas y rastro de usuarios de sitios de toda indole.
Justdelete.me, por ejemplo, ofrece una exhaustiva lista de servicios de los cuales su software puede borrar nuestro perfil, con un sistema de scoring que va desde fácil hasta imposible (porque de hecho de algunos lugares es imposible desaparecer). El servicio es gratuito y es realmente eficiente a la hora de borrarnos de los sitios populares.
La alternativa paga es DeleteMe de Abine, que funciona de manera parecida sólo que es el proveedor el que se encarga de realizar todo el servicio. Además, este software se puede revisar bases de datos como Spokeo.com e Intelius.com y no en simplemente borrar perfiles o cuentas.
Una tercera opción es AccountKiller, que se encarga de guiar a los usuarios en el proceso de borrado de los diferentes perfiles en diferentes plataformas, porque muchas tienen sus peculiaridades y trucos. Pero no es la única.
La forma artesanal
Pero los softwares no son perfectos y siempre existe la alternativa de hacerlo a la vieja usanza, moviendo los dedos y asegurándonos que todo se hace como se debe.
Lo primero es borrar manualmente todas las redes sociales y perfiles o cuentas que se pueda. En la mayoría de los casos va a alcanzar con ir a Herramientas o Cuenta y elegir borrar: La enorme mayoría de los sitios populares tiene esta opción.
Luego, hay que hacer una investigación más a fondo con los motores de búsqueda como Yahoo!, Google, Bing, Ask, GoDaddy, etcétera. Es posible que hayamos olvidado algún perfil obscuro de LiveJournal o cosas como MySpace y Fotolog que cayeron en desuso. Acá es cuando pueden aparecer los problemas. Algunos sitios no permiten borrar permanentemente las cuentas. Tal es el caso de sitios como IO9. La mejor solución es modificar el perfil hasta hacerlo irreconocible: cambiar fotos, direcciones, información, contacto y todo lo que sea necesario.
¿Cómo recordar a todos los sitios donde nos hemos loggeado?
También hay herramientas para eso. Muchos de estos sitios web están pensados para buscar gente, y si bien queremos hacer lo contrario que es desaparecer, la misma función se puede usar con un fin contrario. Buscamos nuestra propia presencia para saber de dónde queremos salir. Disponible en inglés, francés y español, WebMii te ayuda a averiguar la presencia de cualquiera en internet, ya sea alguien conocido o popular o simplemente un nombre anónimo y corriente. WebMii te mostrará fotografías, etiquetas, redes sociales y resultados relacionadoscon la persona a encontrar o con contactos afines.
Otra opción es Pipl suena como people (gente) en inglés y es para lo que sirve este sitio. A partir del nombre, apellidos y/o de su ciudad o país de residencia, Pipl te ofrecerá toda la información disponible en múltiples sitios, como Twitter, Badoo, Flickr, Foursquare, etcétera. Incluso provee nombres de personas relacionadas en algunas de esas redes. Tras la búsqueda, se pueden personalizar los parámetros y filtrar por franjas de edad, cambiar la localización e incluso aportar más datos (teléfono, correo electrónico, nombre de usuario) para ver si así aparece algo más.
Los motores de búsqueda también se pueden limpiar y de hecho Google ofrece una herramientaque es muy útil a la hora de desaparecer lo más que se pueda y volverse "ingoogleable". La herramienta envía peticiones a Google que, vale la pena aclarar, quedan a disposición de la compañia.
Finalmente, es momento de deshacerse de los mails. Lo primero es eliminar las subscripciones a los newsletter y a los servicios de envío automático de mails. Este es el último paso ya que los servicios de mail se usan como verificación y autenticación de todos los demás servicios por lo que si queremos tener control sobre nuestra presencia en otros sitios el mail es vital. Una vez hecho todo lo demás, si queremos, podemos borrar las cuentas de correo electrónico.