La Asociación Americana del Corazón lanzó un informe que indica que el consumo de café está relacionado con el menor riesgo de padecer una insuficiencia cardíaca o un accidente cerebrovascular.
Para determinarlo, los científicos tomaron los resultados del estudio de Framingham, realizado en 1948 para determinar la relación entre la alimentación y la salud del sistema cardiovascular, y los analizaron con el método de aprendizaje de máquinas.
Este sistema, que utiliza la inteligencia artificial para comparar datos y arrojar resultados altamente precisos, determinó que beber una taza de café a la semana disminuye el riesgo de sufrir un accidente cerebrovascular un 8% y de padecer infarto en un 7%.