Una investigación de la Universidad de Sunshine Coast (Australia) creó a Mindy, un modelo 3D que representa al humano en el que nos convertiremos de acá al próximo milenio, a raíz de la hiperconexión.
De acuerdo al estudio, tendremos una espalda y cuellos encorvados debido al tiempo excesivo que pasamos utilizando dispositivos móviles y agachando la cabeza.
Tendremos las manos en forma de garra por la forma de los apartos electrónicos y el "pulgar atascado" sinónimo del tiempo significativo que pasamos escribiendo en el celular. Los codos estarán firmes en los 90º.
Además, el cráneo será más denso debido a la radiación por radiofrecuencias que emiten los celulares y que pueden causar serias implicaciones para la salud cuando el cerebro queda expuesto a ellas.
Por último, tendremos un segundo párpado que serviría para evitar el daño que produce en el ojo mirar frecuentemente la luz que proviene de las pantallas.