A veces con nuestras mascotas es difícil descubrir qué es lo que tienen y si algo les duele. Es por ello que más de una persona puede recurrir a medicarlo sin tener un diagnóstico.
Las consecuencias pueden ser intoxicación, diarrea, vómito, sangrado interno y, en casos graves, hasta la muerte. Y menos aun utilizar remedios para humanos.
Para detectar a tiempo el dolor en tu perro, estate atento a las siguientes señales de alerta:
- Tiene problemas para caminar, subir escaleras o correr.
- Rostro decaído
- Ojos vidriosos
- Mirada perdida
- Actitud agresiva
- Pérdida de apetito
- Dificultad para dormir
- Respiración acelerada
- Debilidad
- Cansancio
- Temblores
- Sumisión
Cuando los perros están adoloridos son renuentes al movimiento, se lamen la zona lastimada y tienen la cola caída y encogida; en casos de molestia abdominal, es frecuente la postura encorvada o de plegaria.
Si percibís que presenta cualquiera de estos síntomas, es importante que lo lleves de manera inmediata con un médico veterinario.
Con tu compañero de cuatro patas no debés descuidar la desparasitación, esquema de vacunación completo, alimentación, higiene, educación y, lo más importante, cariño.