La migración definitiva hacia el nuevo hospital Iturraspe en el norte de la ciudad, prevista para el 14 de septiembre, plantea serias dificultades, e incluso un reclamo formal de los profesionales de la salud, que advierten que “no están dadas las condiciones” para que se cumplan los plazos.
“Recibimos el reclamo de los jefes de Servicios, sindicatos e instituciones y nos parece que no están dadas (las condiciones) para que el hospital comience a funcionar correctamente”, dijo a LT10 Osvaldo Marelli, representante de los profesionales en el Consejo de Administración del nosocomio.
“Faltan enfermeros, el laboratorio no tiene el equipamiento, no hay nada, teóricamente está adjudicado pero no hay nada. El banco de sangre central no está terminado en el hospital Italiano y el nuevo banco de sangre no está en condiciones ni reglamentarias ni por espacio de recibir donantes, no tenemos provisión de sangre en caso de ser necesario, al cambiar el perfil del nuevo hospital vamos a necesitar continuamente”, precisó.
En diálogo con el programa El Cuarto Poder, Marelli remarcó la falta de personal para determinadas áreas del nuevo hospital. En ese sentido, contó que “se pretendía que la Terapia Intensiva funcione con menos camas”.
Además, mencionó que en el servicio de Pediatría “faltan médicos de Guardia para la sala de internación”. “No podemos mantener el servicio con residentes”, se quejó.
Condiciones mínimas
Marelli insistió en señalar que en estas condiciones no se puede cumplir con los plazos previstos de mudanza. “Nosotros no podemos migrar por migrar si no están dadas esas condiciones mínimas. No estamos pidiendo nada del otro mundo, estamos pidiendo funcionar correctamente”, agregó.
Además comentó que el sábado pasado se realizó un simulacro de migración “del cual -dijo- el consejo de administración no estaba enterado, ni siquiera la presidenta que es representante del Estado”.