El simple gesto de llevar el celular en la mano a la hora de correr puede tener consecuencias ya que crean, sin saberlo, un desequilibrio muscular. Este objeto afecta directamente a la dirección de tu cuerpo cuando corrés.
El movimiento natural del tren superior ayuda a la piernas a tener más estabilidad y control, sobre todo cuando la intensidad de nuestra carrera es elevada. Llevar un objeto en la mano interfiere el movimiento normal de los brazos afectando a su mecánica natural y a la técnica.
Después de semanas o meses corriendo así podés sufrir lesiones en la cadera, hombre y rodillas sobre el lado que no sostiene el teléfono y que intenta compensar el peso. Para llevarlo, existen brazaletes deportivos o cinturones tipo riñoneras.