Mucho se fomentó el hábito de alimentación saludable en las escuelas. Se promovió que las cantinas y kioscos tengan variedad de productos para que los niños puedan elegir también comida o snacks menos nocivos para la salud, y prevenir la obesidad infantil, entre otras patologías.
Ahora, desde el Concejo intentan que la implementación se extienda a los peloteros y salones de fiestas infantiles mediante una resolución en la que recomiendan que el municipio promueva usos de alimentación saludable y contribuir así a proteger a la salud de niños y adolescentes.
“Dentro de los objetivos de políticas de alimentación saludable está la de velar para que quienes concurran a estos establecimientos puedan y tengan la posibilidad de incorporar alimentos nutritivamente adecuados a su edad de crecimiento y desarrollo”, explicó Aeberhard autora de la iniciativa.
La resolución dispone que el Municipio confeccione un listado de alimentos que, de acuerdo a sus características nutricionales resulten adecuados. “Es necesario brindar opciones de alimentos, productos alimentarios y bebidas nutritivamente adecuadas” subrayó Aeberhard. El listado deberá actualizarse dos veces al año, atendiendo las características de la época invernal y estival.
La resolución votada este jueves pide “arbitrar las medidas conducentes a fin de evitar que en los establecimientos mencionados se expendan alimentos, productos alimentarios y bebidas de escaso valor nutritivo o cuyo aporte principal esté constituido por calorías vacías que contengan un alto porcentaje de azúcares simples, grasas totales, grasas saturadas o sustancias denominadas trans”, reza el articulado.
Obesidad infantil
La obesidad infantil es un problema de salud caracterizado por el exceso de grasa corporal de los niños. Dicho nivel de adiposidad supone todo un condicionante para su salud general y su bienestar, haciéndole propenso a sufrir otras patologías secundarias y asociadas.
Según explicó Aeberhard “en el Hospital de Niños Dr. Orlando Alassia de Santa Fe es la primera causa de las consultas anuales (el 56 %) en el Servicio de Endocrinología en la franja que va de los recién nacidos a los preadolescentes, razón por la cual el Estado debe llevar adelante las acciones de prevención y alimentación saludable”, dijo.
“Los entornos donde se reúnen los niños deben estar libres de toda forma de promoción de alimentos ricos en grasas saturadas, ácidos grasos de tipo trans, azúcares libres o sal. Dichos entornos incluyen, sin carácter limitativo, guarderías, escuelas, terrenos escolares, centros preescolares, lugares de juego, consultorios y servicios de atención familiar y pediátrica, y durante cualquier actividad deportiva o cultural que se realice en dichos locales”, concluyó la concejala justicialista.