"Me comentó algo mi representante, pero nada concreto todavía. Estamos esperando noticias", reconoció en diálogo con LT10 el delantero Germán Rivero, que en las últimas horas fue sondeado por Unión tras quedar libre en Alvarado de Mar del Plata. Vale recordar que en el plantel los únicos atacantes que quedaron son Franco Troyansky y Javier Cabrera luego de las partidas de Walter Bou y Nicolás Mazzola, por lo que casi por decantación se precisarán refuerzos ahí.
Este diagnóstico lo notó rápidamente el nuevo DT, Juan Manuel Azconzábal, que se puso manos a la obra –a la distancia– pensando en el armado del grupo. Fue así como la secretaría técnica miró hacia el ascenso y se interesó por este típico nueve de área, de 28 años (17 de marzo de 1992) y 183 centímetros, que marcó 11 goles en la Primera Nacional con el equipo marplatense, hasta que el fútbol se detuvo por la pandemia del coronavirus en Argentina.
Arrancó en las inferiores de Argentinos Juniors, luego pasó por Tigre y su primer contrato fue en Flandria. Luego militó en Fenix, Plaza Colonia de Uruguay, Unión La Calera de Chile, Defensor Sporting de Uruguay, Apollon Smirnis de Grecia y esta actuación final en Alvarado bajo el comando de un viejo conocido tatengue, Juan Pablo Pumpido.
En caso que se avance con este interés, Unión sabe que no la tendrá fácil, ya que estaría en el radar de su club inicial, Argentinos Juniors.