En la noche del jueves se conoció el hackeo de la web y la cuenta de Twitter de la Municipalidad de Santa Fe. Una situación que cobró notoriedad por tratarse de un organismo público.
Sin embargo, estos hechos son más comunes de lo que se piensa puesto que hoy en día los datos personales y bancarios están almacenados en nuestros dispositivos y en los sistemas operativos de los mismos.
Por eso es importante tomar precauciones para evitar el robo de información como los datos de las tarjetas de créditos y claves de cuentas bancarias, que pueden provocarnos más de un dolor de cabeza.
En diálogo con Al Derecho y Al Revés, Soledad Martínez integrante de la División de Inteligencia de la PDI, explicó cómo se realizan estos hackeos y que precauciones tomar para prevenirlos.
La modalidad más habitual de los ciberataques es mediante el phishing "técnicamente, el proceso es similar en todos lados, se instalan archivos que roban las claves", mediante un documento adjunto o un link.
Por eso Martínez recomienda tener cuidado con los correos que se reciben y no hacer clic en enlaces sospechosos o proporcionar datos personales, aunque en apariencia provengan de entidades bancarias o empresas de servicio. “Si uno tiene dudas hay que comunicarse con la entidad y consultar".
Asimismo, cuando compramos por internet hay que evitar tener guardado los 16 números de la tarjeta y hacer un seguimiento de las compras.
Por otro lado, advirtió que cuando uno se conecta a una red wifi pública “verificar de quién es. No hay que salir a la calle a cazarlas porque nos pueden interceptar los datos".
Ante un ataque informático, lo importante es hacer la denuncia ya que "se puede hacer un rastreo de IP para ver de dónde se realizaron las publicaciones. Si son de domicilio las IP cambian, en entes públicos son fijas".
En este sentido, señaló que hubo casos en donde se pudo dar con los responsables.
Por último, recordó algunos consejos de seguridad:
-Cambiar las claves, no tener las mismas claves para todo.
-Combinar mayúscula con minúscula.
-Evitar la doble identificación mediante mensaje de texto, ya que pueden duplicar el chip.