Santiago Marino, junto a Benjamín Abraham y Juan Alzamendi, son los encargados de conducir las categorías más bajas en Náutico El Quillá.
El Tiburón, al igual que el resto de los clubes afiliados a la Asociación Santafesina, pudo retomar sus entrenamientos, dejando atrás una larga espera por la pandemia de coronavirus.
“La semana anterior comenzamos a practicar siguiendo el protocolo con grupos de hasta 10 días chicos, se armaron distintos grupos en distintos horarios, de lunes a viernes, desde la siesta y también en la mañana”, expresó Marino.
Para después, enfatizar: “Los chicos volvieron muy motivados, era lo que necesitaban, volver a su lugar, su casa en el deporte, nos puso muy contentos verlo felices a los chicos”.