La tenista ucraniana Marta Kostyuk habló con muchísima dureza sobre el momento que atraviesa su país y cargó sin filtros contra sus colegas rusos. Lo hizo en conferencia de prensa, en el marco del torneo de la WTA de Dubai.
"Ninguno me dijo que se arrepiente de lo que su país le está haciendo al mío ni se han disculpado conmigo o con otras tenistas ucranianas. No tengo explicación de por qué los rusos se comportan así. Me indigna llegar a la pista y ver que su único problema ahora mismo es no poder hacer transferencias de dinero y lo indignante es que hablan de eso", comentó Kostyuk, tras su triunfo contra su compatriota, nacionalizada belga, Maryna Zanevska.
Luego, también en referencia a sus colegas ruso, agregó: "No puedes ser neutral en esta situación. El 'No a la guerra' puede significar varias cosas. Por ejemplo, nosotros (Ucrania) podríamos terminar la guerra rindiéndonos. Pero esa nunca fue una opción. ¿Qué es lo que quieren ellos? ¿Quieren que Ucrania pierda? ¿Que Rusia gane? ¿Que Rusia pierda? Lo diré cien veces: Ucrania nunca se rendirá. Así que 'No a la guerra' para mí significa querer que Ucrania se rinda porque Putin nunca se detendrá, todo el mundo sabe lo loco que está. Así que luchamos. Y estos comunicados de prensa me duelen porque no tienen sentido".
El temor por su familia y la culpa inicial por seguir jugando al tenis en medio del ataque de Rusia a Ucrania
Luego se refirió al temor por el estado de su familia en medio de la guerra y a la culpa inicial que sintió por seguir jugando al tenis: "Te acostás sin saber si todavía tendrás una familia cuando despiertes. Ese fue mi estado mental los primeros días. Luego, te acostumbrás a la situación, entendés lo que está pasando, quién está haciendo qué, las tácticas de los rusos... Al principio me sentí culpable por no estar ahí. Toda mi familia está ahí menos yo, ¿por qué? Me sentí culpable jugando al tenis, que el cielo sobre mí era azul y tranquilo. Pero no es saludable. Todos luchan como pueden. Mi trabajo es jugar al tenis. Así es como puedo ayudar. Nunca me había sentido tan unida a mi país y al pueblo ucraniano como hoy. Somos una gran familia".