Luego de las buenas sensaciones que dejó el triunfo en San Juan ante los Wallabies, el seleccionado nacional ya está en Nueva Zelanda, listo para intentar darle un nuevo cachetazo a los All Blacks.
Juan Imhoff, presente en el histórico éxito de 2020 pero hoy mirando desde la Argentina, dejó en claro que la mentalidad del jugador argentino hoy es ir a batir a cada adversario, pero ve con mayor importancia el proceso y el trabajo para conseguirlo.
"En el rugby internacional no hay ningún partido que se le parezca al otro y ningún rival que sea menos o más. Sí, estamos hablando de los All Blacks, el mejor del mundo por muchos años, y no es porque ya les hayamos ganado una vez, pero vamos a jugar a ganar todo. Hay que creer en el proceso y estar convencido que les podemos ganar", comenzó en diálogo con ESPN.
"Tanto para Cheika como para nosotros, el resultado de acá al Mundial es anecdótico. Si bien querés ganar todo, no te vas a volver loco si cumpliste todo el proceso y fueron mejores que nosotros en este momento y te ganan. Hay que sacarse el sombrero y felicitar".
"Pero vamos a decir la verdad y si hoy Argentina puede ser mejor que los All Blacks y si el partido se da para que nosotros hagamos menos errores y juguemos mejor que ellos, la idea es poder hacerlo. No ir a no jugar, la idea es ir a jugar y ganar", sumó.
Puma desde 2011, Imhoff fue de los primeros jugadores argentinos que vivió el Rugby Championship y el hecho de enfrentar de manera cotidiana a las potencias del hemisferio sur: "los mirás diferente, no sé si con optimismo pero se ven diferente los jugadores que jugás regularmente a uno que lo ves poco, que lo ves más por la tele o por un video. Rompe esa barrera de ese miedo por el no saber".
"Hoy todos los equipos se conocen muy bien, conocemos muy bien a los All Blacks porque la gran mayoría ha jugado, entonces te pone en una situación que empezás a entender que son de carne y hueso y que son seres humanos y que va a pasar por una cuestión técnica pero también mental", manifestó.
Además, aseguró que el irregular presente de Nueva Zelanda no tiene un lugar trascendental en el análisis argentino: "eso sería engañarse. Lo dijimos como equipo, si nosotros estamos esperando que los demás equipos estén mal para ganarles, quizás es un momento para eso, pero el jugador lo que se está haciendo es tratar de creer que podemos ser mejores que ellos. Nos preparamos mejor y después queremos ganarles para demostrarlo. Eso es lo que hoy el staff intenta meterle en la cabeza al jugador".