L-Gante y Tamara Báez, ambos padres de Jamaica, son los protagonistas de una relación que tiene incontables capítulos por sus contantes idas y vueltas.
En los últimos días, el cantante estuvo otra vez bajo el ojo de la tormenta por una presunta infidelidad a la madre de su hija.
El lunes se difundió un video donde se lo ve en la salida de un hotel alojamiento con una de las bailarinas de sus shows, Luli Romero.
Si bien algunos usuarios dijeron que se trataría de una "movida de prensa armada", el artista habló del tema por primera vez.
Junto al rosarino Alejandro Paker, participó de un móvil y fue contundente cuando le preguntaron acerca del video difundido.
"Que la cuenten como quieran", empezó. "Yo estoy podrido, no me voy a regalar pero no le quiero dar fama a nadie", concluyó.