Ante el elevado porcentaje de inflación que todos los meses registra la economía, los argentinos buscan la manera de ponerse a resguardo de la devaluación, o al menos perder lo menos posible. En ese sentido, uno de los rubros en que más se notó el aumento es en el consumo con las tarjetas de crédito, con las que los usuarios tratan de aprovechar las cuotas sin intereses o con un interés relativamente bajo comparándolo con la inflación.
En ese contexto hay que recordar que los bancos están obligaos a informar a la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) los movimientos de las cuentas y las tarjetas de crédito de los usuarios a partir de un monto mínimo de consumo.
El último monto que dio a conocer ahora la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), se elevó de $30.000 a $90.000 la cifra mínima para informar las acreditaciones, extracciones, saldos de las cuentas y los depósitos a plazo fijo, según informa Iprofresional.com.
Con estas modificaciones, los bancos podrán agilizar las operaciones y a su vez, recibirán información automática y permanente de las acreditaciones mensuales, extracciones, saldos de las cuentas, los depósitos a plazo y consumos con tarjetas.
En el marco de la entrada en vigencia del programa Ahora 30, que permite acceder a un financiamiento en cuotas fijas para compras de televisores, aires acondicionados, heladeras, lavarropas y celulares, la Secretaría de Comercio está trabajado con las entidades financieras para que los bancos aumenten los límites de las tarjetas de crédito.
El plan contempla compras con un límite de $200.000, a excepción de los teléfonos, cuyo tope es de $120.000. Y ofrece una tasa del 48% anual, la mitad de lo que se ofrece en el mercado, lo que implica que el consumidor debe contar con un límite suficiente en su tarjeta de crédito.