Luego de un Masters 1000 de Montecarlo decepcionante, Novak Djokovic tuvo que transpirar más de la cuenta una vez más para vencer a un joven Luca Van Assche. El francés de 18 años sorprendió al batallar de igual a igual con el número 1 del ranking mundial, que se llevó el partido por 6-7, 6-3 y 6-2 para seguir con vida en el ATP 250 de Banja Luka. No obstante, Nole tuvo mucho que decir sobre las canchas del certamen bosnio.
Los problemas físicos, más precisamente en su codo, arrojaban ciertos interrogantes sobre el serbio previo al debut en Banja Luka. Más allá de que aseguró estar "lo mejor posible", el ganador de 22 Grand Slams no se vio del todo cómodo. Luego de su trabajada victoria, Djokovic expresó su total disgusto con el estado de las canchas del torneo, su segundo en polvo de ladrillo: "Jamás había jugado en una pista tan lenta y con unas condiciones que ralentizaran tanto el juego. Ha sido muy difícil, durante un set y medio me era imposible desbordar a Luca, llegaba a todas las bolas", sentenció.
Claro está que, al no estar al 100% de sus condiciones, Djokovic no luce esa potencia en sus golpes. Eso es tan cierto como que el clima, lluvioso y húmedo en los últimos días, perjudicaron en gran manera a la arcilla de Banja Luka. Así, la cancha estaba lucía hasta embarrada y la pelota parecía de plomo.
Pese a todas esas adversidades y ante un joven sediento de batacazos, Nole se sobrepuso y logró una importante victoria, principalmente en el aspecto anímico: "Es genial haber podido vencer a un jugador joven y tan prometedor como Van Assche. La verdad es que no lo conocía y fue complicado porque no me siento en mi mejor nivel. Nunca se sabe lo que puede ocurrir cuando ya eres un veterano, pero me he marcado como objetivo jugar muchos años más. Competir en Banja Luka está siendo muy emocionante y ojalá pueda seguir viviendo experiencias como esta", agregó, ya sin tanto enojo.
Además, se mostró satisfecho con el estado de su molestia y advirtió que quiere seguir ganando: "El codo ha aguantado bien y que lo haya hecho en un partido como éste, de más de dos horas y media de duración, me muestra que estoy sano. No son buenas estas condiciones para las articulares, pero me encuentro bien y tengo hambre de victorias". Tras su debut victorioso, Djokovic volverá a jugar este jueves y su rival saldrá de su compatriota Lajovic y el francés Barrere.