Unión se enfoca de lleno en el partido del próximo viernes a las 19 ante Belgrano, en el Gigante de Alberdi de Córdoba, donde buscará una victoria que lo deje momentáneamente como líder del Torneo de la Liga Profesional.
Cristian González, tras el empate ante River, describió el cuadro de situación de varios jugadores del plantel que arrastran inconvenientes físicos de cara a los próximos compromisos, y producto del trajín de los últimos días.
Es que Unión en una semana jugó tres partidos de alto boltaje, en la derrota ante Racing por 2-1 en Avellaneda, el triunfo ante Rosario Central por 1-0 en el 15 de Abril, y el empate sin goles frente a River en Santa Fe.
De cara al partido ante el Pirata, la buena noticia es que Claudio Corvalán cumplió con las dos fechas de suspensión y estará en condiciones de ser de la partida. Es muy probable que ingrese por Miguel Torrén, o por Bruno Pittón si es que no está en buena forma física.
Esta última alternativa se daría en el caso de que Simón Rivero, quien también salió en el entretiempo en el partido ante River por una molestia física, tampoco pueda ser considerado, con lo cual Mateo Del Blanco es una opción para el mediocampo, y Corvalán para ingresar al lateral izquierdo.
Si Rivero no está en condiciones podría ser reemplazado nuevamente por Enzo Roldán, Del Blaco o hasta incluso por Jerónimo Dómina, quien en algunos tramos de este certamen fue utilizado por ese sector del campo de juego.
Y arriba hay dos dudas. La de Nicolás Orsini, quien por una molestia lumbar se perdió el partido ante River, y Adrián Balboa, quien salió con una molestia física. Si ambos están bien serán titulares, si uno no llega seguiría entre los 11 Gonzalo Morales, y si ninguno está en consideración también podría meterse Lucas Gamba.
Con todos estos imponderables trabaja el plantel tatengue en Casasol, mientras los dirigentes negocian el levantamiento de la inhibición en FIFA para poder salir con todo al mercado de pases en busca de las opciones que pretende Kily para potenciar al plantel.