Un perro fue hallado sin vida este martes dentro de un vehículo Peugeot 208 color gris en calle Corrientes al 600, pleno microcentro de Rosario, y según vecinos y comerciantes de la cuadra, permanecía encerrado desde la mañana temprano.
Un efectivo de la Policía precisó que al arribar decidieron no romper el vidrio porque "se podía ver a simple vista que el perro ya estaba sin vida", producto del calor y la falta de oxígeno en el encierro.
La dueña del auto regresó por la tarde al vehículo, y al abrir la puerta se encontró con su perro muerto. Según precisó un policía del operativo, la mujer al regresar y ver el hecho "se descompensó, por lo que no pudo dar demasiadas explicaciones".
Personal del 107 atendió a la mujer en una zapatería, mientras la Brigada Motorizada esperaba se recompusiera para llevarla a declarar a la comisaría 2ª y formarle una causa por maltrato animal.