Las argentinas Ana Gallay y Georgina Klug, campeonas de beach volley en los Juegos Panamericanos de Toronto 2015, viajarán mañana rumbo a Austria, donde jugarán el Grand Slam de Klagenfurt (del 25 al 31 de julio) como puesta a punto para los Juegos Olímpicos de Río. La entrerriana Gallay y la santafesina Klug, que tienen previsto su debut olímpico el próximo 6 de agosto frente a Elsa-Liliana, de España, participarán del cuarto Major del Circuito Mundial en Klagenfurt en su vuelta a la competencia internacional.
"Estamos muy bien, preparándonos a full con la parte física y puesta a punto porque tuvimos un año de muchos torneos y teníamos que hacer hincapié en ese aspecto", expresó Gallay, que viajará con Klug y su entrenador Pablo Del Coto, al sitio oficial de la Federación Argentina (FeVA).
"La intención es sentir nuevamente la competencia para llegar con un rodaje fuerte a los Juegos Olímpicos. Estábamos en duda si entrenar una semana en Río o viajar a Austria, y creemos que después de tanto entrenamiento tenemos que retomar el juego", agregó la nacida en Nogoyá. Gallay se encuentra recuperada de una lesión en el hombro derecho.
"Estoy entrenando con normalidad. Hicimos un gran trabajo de recuperación en todo este tiempo, y si bien no podía exigir el hombro, los entrenamientos no cesaron en intensidad".
"Trabajamos en piernas y sólo un poco en lo que tiene que ver el movimiento del brazo. Lentamente, y con el trabajo planificado de Pablo Del Coto, nuestro entrenador; Ariel Caltabiano, preparador físico; Sol Celesia, osteópata; y Pablo Fernández, kinesiólogo, pude recuperarme de la mejor manera y estoy óptima para el torneo de Austria y los Juegos Olímpicos", manifestó Gallay.
La pareja nacional (11a. en el ranking FIVB) conformará el grupo B en los Juegos, junto a Liliana-Elsa (10as.) de España, Agatha-Bárbara (17mas). de Brasil y Slukova-Hermannova (20as.) de República Checa. Para la jugadora de 31 años, Río será su segundo Juego OIímpico (en Londres 2012 compitió junto a Viriginia Zonta).
"La primera sensación que se me viene es de alegría y orgullo de volver a vestir la celeste y blanca, y representar a nuestro país en la máxima aspiración que tiene un deportista. Vivir un Juego Olímpico es lo máximo, y eso me inunda de felicidad", aseguró.