El ministro de Desarrollo Social, Jorge Álvarez, ordenó el inicio de un sumario a una docena de profesionales de la Subsecretaría de Derechos de la Niñez, Adolescencia y Familia, en torno al caso de Nicolás Almada, el chico asesinado a golpes por su padrastro y su madre el 16 de noviembre de 2016.
En ese contexto, la directora general de Asuntos Jurídicos de esa cartera, Laura Sacco, pidió la declaración de los equipos interdisciplinarios que actuaron con anterioridad al homicidio.
Así, deberán dar su versión de los hechos el personal que estaba en la guardia telefónica en octubre de 2015, cuando Nicolás sufrió lesiones; los empleados de Campo Andino (donde vivió con su tía un tiempo), los trabajadores del centro de salud de Loyola y los de la escuela Nº 1.109 de esta capital.
Cabe recordar que la hermana de Nicolás, Caterina, de 10 años, continúa institucionalizada.