Gustavo Alfaro, entrenador de Huracán, rival de Unión el próximo domingo desde las 14.05, en el Tomás Adolfo Ducó, habló con Diez en la City por FM "X" (103.5) sobre el duelo que ambos equipos animarán por la cuarta fecha de la Superliga. Además, contó por qué no aceptó dirigir al Tate antes de cerrar el regreso de Leonardo Madelón y también opinó sobre el presente de la Selección Argentina.
En el arranque de la charla, sobre el cotejo ante el Lobo, dijo: "Por suerte están bien los jugadores, era ante Gimnasia una demostración importante que teníamos que darnos, ya que habíamos hablado que de los cuatro partidos que venían por delante tres iban a ser de visitante, y teníamos que dar una demostración de visitante que podíamos jugar igual que de local, más felices todavía porque hacía mucho tiempo que Huracán no podía ganar en cancha de Gimnasia, por suerte se pudo ganar y se lo hizo bien (hacía 31 años que no se imponía en La Plata)".
Y agregó: "En la previa le dije a los jugadores que si queríamos cambiar la historia grande hay que cambiar la historia chica, la cual se escribe todos los días. Es un camino para ir convenciendo a un plantel hacia un destino que quiere tener, es una circunstancia ya que no deja de ser una victoria de visitante que tuvo el equipo, ya que lo que pasó no es resorte nuestro, y uno tiene que hacerse cargo de lo que tiene entre manos hacerla. Pero así se va trabajando en las convicciones del jugador, que tiene que saber que solo se logró dar un paso hacia adelante".
Sobre qué cerca está su equipo de la idea que tiene, respondió: "Muy lejos, porque es un cuerpo técnico y un plantel nuevo, hay jugadores que están lesionados y se están recuperando, y otros que llegaron sobre el cierre del libro de pases y no están en su mejor forma. Venimos en un proceso de formación y armado".
Luego, se lo consultó sobre cuán cerca estuvo de ser DT de Unión antes que llegue Madelón y contó: "Me llamó Zuccarelli cuando estaba en Rusia, pero por cuestiones personales no me podía mover de Buenos Aires hasta fin de año, no pensaba dirigir. Como tuve la propuesta de Unión también tuve de Olimo, Atlético Tucumán, Cerro Porteño y Liga de Quito, pero no quería tomar ninguna responsabilidad. Por eso le dije a Martín que le agradecía y que los tiempos de Unión no eran compatibles con los míos. Cuando llegué de Rusia me junté con el presidente de Huracán, nos pusimos de acuerdo, y si bien estaba mucho más comprometido con el promedio, la idea era armar un equipo que me permita clasificar a una copa, pero mi idea era no trabajar hasta diciembre".
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"Unión y Colón son equipos muy buenos, que necesitan volver a tener la regularidad en Primera para dar el salto de calidad para pelear clasificaciones a Copa, instalarlos en ese lugar. Santa Fe es una plaza muy linda, y ordenados están en posibilidades de crecimiento permanente", agregó sobre su futuro vinculado a los equipos santafesinos.
En tanto, contó su idea de juego en el Globo y sobre jugar con tantos jugadores de ataque y afirmó: "Lo fundamental es tener orden, el orden contra el desorden generalmente gana el orden, que no quita la libertad de los jugadores en ofensiva. Le preguntó si quieren correr para recuperar la pelota o jugar, me responden jugar, pero si no recuperamos la pelota no podemos jugar. Mientras más rápido la recuperemos más tiempo tendremos para jugar. Si no trabajamos todos para recuperar la pelota no podemos jugar".
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Mientras que también habló sobre la realidad de la Selección y expresó: "La veo con la preocupación que la vemos todos los que estamos inmersos en el fútbol argentino, ojalá los jugadores entiendan que no hay Rusia 2018 si no se le gana a Perú, y que es la final del Mundo. Es el que le da la clasificación al Mundial o lo pondrá en una situación complicada hasta para el Repechaje. El jugador argentino sabe que juega con la presión del momento y de la historia, Argentina es protagonista de los mundiales, entonces no podemos descansar solo en el talento o las capacidades, sino que hay que dar un plus que surge del amor propio y de la impronta de cada jugador. Perú se juega la gloria, ya que hace tres fechas estaba fuera de toda discusión. Vamos a jugar con un equipo que más allá de la diferencia de jerarquía vendrá por la gloria. Es indistinto jugar donde sea, sino que lo importante es la presión y la determinación que tiene que poner el jugador dentro de la cancha para ganar un partido que es impostergable".