En este papel relevante de los videojuegos formativos confía el equipo de docentes de la Universidad de Salamanca, que participa en el proyecto europeo de investigación “eConfidence”.
El proyecto está liderado por el Instituto Tecnológico de Castilla y León, y participan en él otras entidades como Nurogames (Alemania); EVERIS (Madrid); European Schoolnet (Bélgica); y la Facultad de Humanidades y Ciencias Sociales de la Universidad de Rijeka (Croacia).
Vega López González, del equipo de la Universidad de Salamanca, ha explicado a EFEsalud que la investigación está además dirigida a un segundo objetivo, también de especial relevancia: el uso seguro de internet por parte de los más jóvenes.
Los videojuegos formativos, que van más allá del puro entretenimiento de los jugadores porque pretenden enseñar algo y/o cambiar actitudes y comportamientos del jugador, son la herramienta elegida asimismo para este segundo propósito.
“Estos aspectos, junto con el hecho de que los videojuegos están normalmente asociados con el entretenimiento, los convierte en una herramienta cuya importancia está aumentando considerablemente como un modo de recuperar la motivación.”
Ya existen experiencias con videojuegos para trabajar con niños disléxicos los conceptos de conciencia fonológica y reconocimiento de palabras (Jimenez & Rojas, 2008), o para el desarrollo de inteligencias múltiples en los estudiantes (Del-Moral-Pérez, Guzmán-Duque & Fernández, 2014); o la educación de la salud oral (Aljafari, Gallagher & Hosey, 2017).
De acuerdo con Dan Olweus, uno de los máximos especialistas en acoso escolar, se puede identificar esta conducta a través de tres principios: agresión intencional, repetición, y poder desequilibrado.
Además del acoso escolar, refiere la investigadora, “hemos querido también prestar atención a otro problema que está causando preocupación en la sociedad y, especialmente, en las comunidades educativas actuales, como es el uso seguro de internet”.
Fernández-Montalvo, Peñalva & Izarabal (2015) analizaron cómo usan internet los estudiantes españoles de entre 10 y 13 años y encontraron que tienen muchos comportamientos que pueden suponer un riesgo para ellos, por ejemplo, quedar con personas que no conocen o insultar a otras a través de la red.
Hay que recordar que España es uno de los países donde más ciberacoso sufren los menores, en especial los adolescentes de 13 años.
Educadores e instituciones están intentando resolver este problema a través del uso de recursos como talleres, libros educativos, vídeos.. y “nosotros creemos que los vídeojuegos formativos o ´serious game´ pueden ser una herramienta útil para ayudar a solventar este problema”.
Videojuegos y acoso escolar: eConfidence
En el proyecto eConfidence, financiado por el programa de investigación e innovación de la Unión Europea Horizon 2020, participan 360 niños de 12 y 14 años, de diez colegios españoles y de habla inglesa.
En concreto son cinco escuelas de España: Colegio Sagrado Corazón e IES Fernando de Rojas (Salamanca); IES María De Molina (Zamora); IES Parque Goya (Zaragoza); e IES María Blasco (Alicante), y otras cinco de países anglo-parlantes: Christ the King College y St Theresa Seconday School (Inglaterra); Maria Regina College y St Nicholas College (Malta); y Killorglin Community College (Irlanda).
Con esta investigación, de 24 meses, se quiere buscar una nueva metodología para crear videojuegos formativos orientados al cambio de comportamientos de forma que se guíe a los jugadores a una actividad donde se tenga una perspectiva más amplia del problema y de cómo puede ser modificado y mejorado en su comportamiento.
“Para verificar si el uso de los juegos creados por eConfidence causan cambios cognitivos, emocionales y comportamentales, se seguirá un diseño de investigación cuasi experimental a través de la aplicación de un pre-test y un post test con grupos experimentales y de control”.
El grupo experimental participará en la actividad educativa jugando a uno de los juegos y el de control no participará en el uso de dichos juegos, pero también será evaluado a través de los mismos instrumentos.
Coordina el proyecto en la Universidad de Salamanca, la catedrática de Tecnología Educativa Ana García-Valcárcel Muñoz-Repiso y, entre otros, forman parte del equipo: Azucena Hernández Martín, profesora dePedagogía y Educación Social; Luis M. González Rodero, profesor en el Departamento de Didáctica, Organización y Métodos de investigación; Ana Iglesias Rodríguez, profesora en la Escuela Universitaria de Educación y Turismo de Ávila y máster en Psicopedagogía clínica; y Marcos Cabezas González, profesor Ayudante Doctor en el Departamento de Didáctica.
Uso seguro de internet
Sentarse con los hijos y ver el uso que hacen de internet, revisar las imágenes que se han compartido en los perfiles de redes sociales o comprobar que no se hayan compartido tanto imágenes como contenidos íntimos que puedan afectar tanto a su hijo como a sus amigos, son algunas de las recomendaciones incluidas en un decálogo que la Policía Nacional confeccionó hace tres años.
El Grupo de Redes Sociales de la Policía también introdujo en esta lista cuestiones básicas como la necesidad de que los niños tengan patrón de acceso en el móvil, antivirus y que cambien las contraseñas regularmente.
Hay puntos dirigidos a controlar que los menores respeten, ante todo, a los demás, a detectar el ciberacoso y a concienciarles de que no deben agregar a desconocidos en sus espacios personales.
Controlar que los niños tengan bien configurados sus perfiles, racionalizar el uso de los aparatos electrónicos o aconsejarles que se salgan de los grupos ocasionales de verano creados en Whatsapp, son otras de las medidas.
EFE/Mario Ruiz