Unas palmadas en la espalda, unas palabras de agradecimiento y una ceremonia en la que compartió el primer escalón del podio: el británico Lewis Hamilton trató de consolar hoy a su compañero Valtteri Bottas después de que una orden de equipo impidiera al finlandés ganar el Gran Premio de Fórmula 1 de Rusia.
Hamilton se impuso en el circuito de Sochi por delante de Bottas después de que la escudería Mercedes instara al finlandés a ceder el liderato de la carrera en la vuelta 26.
"Tienes que dejar pasar a Lewis en la curva 13", le dijeron desde el muro. Tras acatar la orden, el finlandés dijo a sus ingenieros que él iba más rápido que Hamilton. La respuesta que recibió fue que el británico tenía daños en el neumático trasero izquierdo y que su segunda posición corría riesgo con el Ferrari del alemán Sebastian Vettel al acecho.
Cuando quedaban pocos kilómetros para el final, Bottas volvió a preguntar a su equipo si ya podía recuperar la posición, pues Vettel conducía ya lejos. La contestación fue negativa. "Lo discutiremos después de la carrera", indicó Toto Wolfff, jefe de Mercedes.
Gracias al triunfo, Hamilton dio un paso de gigante hacia su quinto título de Fórmula 1 y abrió una brecha de 50 puntos respecto a Vettel en la clasificación general.
"Es un día muy difícil porque Valtteri ha hecho un gran trabajo todo el fin de semana. Ha sido un gran caballero por dejarme pasar. Él no está peleando por el título y yo sí", agradeció y justificó Hamilton el adelantamiento.
"Puedo entender lo difícil que ha sido para Valtteri, se merecía la victoria. Pero somos un equipo", añadió el británico. "No me siento particularmente bien y estoy seguro de que Valtteri lo hará realmente bien en las próximas carreras".
Bottas se bajó del bólido con cara de pocos amigos y enseguida recibió el agradecimiento de Hamilton. El británico, incluso, permaneció al lado del finlandés mientras le entrevistaban y al final le dio unas palmadas en la espalda.
"Ha sido un buen resultado para el equipo, pero personalmente ha sido un día difícil para mí", comentó Bottas. "Siempre miramos todos los escenarios y yo no estoy luchando por el campeonato. Es lo que hay".
En la ceremonia del podio, con el presidente de Rusia, Vladimir Putin, Hamilton escuchó el himno en el primer cajón y después le dijo a Bottas que se subiera con él al mismo escalón para recibir la copa.