"Ahora los dirigentes me pueden echar tranquilos", manifestó Leonardo Madelón, cuando se presentó la nueva camiseta Kappa antes de comenzar la Superliga, mostrando su satisfacción por los jugadores que los dirigentes le habían traído en el mercado de pases.
Es que en aquel entonces (junio de 2019), habían arribado Walter Bou, un viejo anhelo que llegó de Boca, Juan Ignacio Cavallaro, que venía de descender con Tigre pero de ser campeón de la Copa de la Superliga y Gabriel Carabajal, por quien se hizo una gran inversión para comprar su pase.
Pero la realidad fue que el equipo redondeó una pobre primera parte de Superliga, que encontró su punto más alto en la victoria por 1-0 frente a Colón, en el Clásico Santafesino, en el estadio 15 de Abril.
Antes de comenzar la segunda parte se fueron tres jugadores claves y titulares como Yeimar Gómez Andrade, Damián Martínez y Nelson Acevedo, pocos días antes del primer partido ante Argentinos, con lo cual Madelón luego reconoció que estuvo a punto de dar un paso al costado, pero su decisión se postergó por la victoria por 1-0.
El equipo no pudo encontrar regularidad en la Superliga, mientras que en la Copa Sudamericana hizo historia al acceder a la segunda fase tras dejar en el camino al poderoso Atlético Mineiro de Brasil.
Pero en la Copa Argenitna quedó eliminado tras perder inesperadamente Dock Sud, en los penales, en cancha de Atlético de Rafaela, lo que golpeó mucho al entrenador. Su decisión de dar un paso al costado se terminó de cerrar tras la derrota por 3-0 ante Vélez, en la última fecha de la Superliga.
Entonces los dirigentes apostaron por Marcelo Mosset para el primer partido de la Copa de la Superliga ante Arsenal, mientras se comenzaron a analizar varias alternativas, aunque dicha búsqueda quedó trunca debido al parate obligado por la cuarentena, como consecuencia de la pandemia del coronavirus.
Se apuntó a Jorge Almirón, Gustavo Alfaro y Juan Pablo Vojvoda como prioridad, aunque dichas alternativas comenzaron a desvanecerse por diferentes motivos, pero sobre todo porque estos entrendores no evalúan a Unión como un posible destino en esta altura de sus carreras.
Entonces se barajaron varias alternativas, tras muchísimos ofrecimientos, aunque ninguno terminó de convencer. La búsqueda está claro que se hace con mucha tranquilidad debido a que no hay certezas en cuanto a la reanudación de la competencia, y no estaría en los planes hacer un gasto innecesario para un sueldo de un entrenador que no tendría trabajo inmediato.
Con lo cual comenzó a evaluarse la chance que Mosset dirija hasta el final de la Superliga si es que se reanuda, aunque también se mencionó que de manera interina podría hacerse cargo del equipo el manager Martín Zuccarelli.
También se mencionó a Luca Marcogiuseppe, quien fue ayudante de Madelón en su tercer paso por el club, como una potable alternativa. Esta es una opción que le agrada a dirigentes, sobre todo porque fue desafectado de su grupo de trabajo por parte del Francés.
En tanto que también se comenta que está bajo análisis el nombre de Silvio Rudman, quien viene de trabajar en Monagas de Venezuela y tiene un paso por el fútbol de méxico como entrenador.
Son todas las alternativas que se están evaluando y que por más que haya tiempo por el parate del coronavirus, es clave saber quién se hará cargo de la conducción técnica del equipo debido a que habrá que tomar decisiones claves como son el armado del plantel y decidir sobre qué jugadores podrán quedarse y cuáles no cuando finalice la temporada.