El aporte de vitaminas y de distintos tipos de nutrientes posicionan al mate como una mejor opción de cara al desayuno de todos los días. Sin embargo, tanto el mate como el café tienen sus beneficios y sus contraindicaciones. A continuación, compartimos algunos detalles para profundizar al respecto.

¿Por qué se dice que el mate es mejor que el café para las mañanas?

Ya nadie cuestiona el hecho de que el desayuno es la comida más importante del día. Tostadas, frutas y semillas de todo tipo suelen ser algunos de los elementos que aparecen con mayor frecuencia al momento de pensar en los sólidos.

No obstante, lo más habitual es acompañar a los mismos con alguna infusión. En el caso de Argentina, dos de las opciones más usuales son las del mate y el café.

Más allá de que todo, en definitiva, se reduzca a una cuestión de gustos y preferencias, existen ciertas características que hacen que una de las dos infusiones sea más recomendable a la hora de encarar cada mañana.

¿Por qué se afirma que el mate es mejor que el café? En primer lugar, funciona como diurético y posee una gran cantidad de condiciones antioxidantes. 

Además, sus propiedades nutritivas son considerables, ya que aporta al organismo varias de las vitaminas B y también C y E. 

Por otro lado, también ofrece potasio, hierro, magnesio y una gran cantidad de aminoácidos.

Eso sí: lo que hay que tener en cuenta en relación al mate es que de ninguna manera reemplaza el mínimo de 2 litros de agua que se recomienda tomar por día.

El desayuno de cada mañana: ¿qué pasa con el café?

En este último sentido, el café no se queda atrás, dado que también presenta componentes antioxidantes, propiedades nutritivas como vitaminas y elementos como el potasio y el magnesio.

Además, entre otros beneficios, el café ayuda a disminuir los dolores de cabeza, a aumentar la capacidad de concentración e incluso a evitar coágulos sanguíneos.

A pesar de esto, su consumo excesivo (a partir de 3 tazas por día) puede generar adicción y fenómenos corporales como aumento de la presión arterial, del colesterol, de migrañas, de taquicardias y de insomnio, entre muchos otros más.

De más está decir que todo consumo excesivo de una bebida resulta perjudicial, pero en el caso del mate se presentan menos efectos adversos.

El mate y el café: el problema que tienen en común

Más allá de las propiedades particulares de cada infusión, hay un efecto adverso que el mate y el café tienen en común. ¿De qué se trata? En la mayoría de los casos, el consumo de estas bebidas se produce a altas temperaturas.

De acuerdo a estudios médicos, esto podría aumentar la posibilidad de contraer cáncer de esófago. En esto lo que influye no es la bebida, sino la temperatura en la cual se la consume.

Lo recomendable sería tomar tanto el mate como el café a menos de 65°C. De lo contrario, ambas bebidas generan por igual daños en el tubo digestivo superior, lo cual abarca boca, laringe y esófago.