Desde el 30 de junio, cuando terminó su contrato con Colón, el arquero Leonardo Burián le dio la prioridad para charlar sobre su continuidad. Después de varias semanas de vacaciones e imponderables para viajar desde Uruguay por las restricciones, Cachorro regresó para charlar con la dirigencia y avanzar en los nuevos términos.
El gran problema lo tiene con su familia, que no puede acompañarlo en Santa Fe y por eso lo estuvo pensando hasta último momento. Pero logró resolverlo y apuesta a quedarse los últimos pasos de su carrera en el Sabalero, que le propone dos años más de vínculo.
Hay optimismo en todas las partes para que se resuelva rápido, aunque lo económico siempre suele ser algo que lleva más tiempo de lo esperado. Asimismo, hay dudas respecto a si podrá jugar el domingo ante River, producto de que llega con escasa preparación, pese a que estuvo trabajando por su cuenta. Caso contrato, Ignacio Chicco será quién esté en el Monumental.
Burián ya charló con Eduardo Domínguez y eso abre el abanico de expectativas, pero cuando se trata de negociaciones, todo puede pasar. Horas claves para su continuidad.