Tras mostrar una desaceleración en agosto, los precios volvieron a acelerarse en septiembre, y el costo de vida de ese mes se habría ubicado apenas por debajo del 3%, según especialistas.
El mismo, indican, fue impulsado por las subas en alimentos -un tema que el Gobierno no ha podido controlar-, medicina prepaga, escuelas y subas estacionales como en el turismo.
En agosto último, la inflación relevada por el INDEC arrojó 2,5% y perforó el 3% mensual por primera vez desde septiembre del 2020.Además, la medición fue la menor desde el mismo mes del año pasado.
El INDEC difundirá el Índice de Precios al Consumidor (IPC) el próximo jueves, que ya alcanzó 32,3% en los primeros ocho meses del año y 51,4% interanual.
Una vez más el precio de los alimentos superaría el nivel general y, en la evolución del período agosto contra igual mes del 2020, la suba en alimentos y bebidas fue del 54,4%, cuando el índice general subió 51,4%.
El Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) que elabora mensualmente el Banco Central estimó que la inflación esperada para septiembre es del 2,7% y que el 2021 cerraría con un incremento en los precios minoristas del 48,4%.
Esa cifra está por encima del 45% que plasmó el Gobierno en el proyecto de Presupuesto 2022 enviado recientemente al Congreso, aunque el ministro de Economía, Martín Guzmán, se mostró optimista, al señalar que se espera una reducción interanual en los próximos meses.
La mayoría de las consultoras privadas espera que los aumentos se ubiquen entre 2,7% y 2,8% de acá a fin de año, salvo en diciembre, para cuando pronostican una tenue aceleración por cuestiones estacionales, contrariando el pronóstico de Guzmán.
Si se cumplen esas proyecciones, la inflación acumulada para 2021 giraría alrededor del 48%.