Si bien nunca pierde la buena onda, por estos días Guido Süller la pasa mal. Hace tiempo tiene problemas en su ojo derecho, y este fin de semana, al ir a un control médico, se enteró de que debía pasar por el quirófano.
Tras la intervención, ayer regresó a su casa. "Fue una operación de 3 horas, con anestesia local, intubado. Me vaciaron el ojo, literal. En realidad, me tengo que hacer los dos ojos, pero ahora no puedo, porque quedo ciego. Me van a hacer de a uno. Me sacaron una membrana que tenía pegada en la retina, que es la parte más delicada del ojo, detrás de todo, donde están las neuronas. Me cosieron, me sacaron el cristalino del ojo", detalló a la revista Paparazzi.
"Y ayer, cuando me van a sacar el parche para ver cómo estoy, la doctora ve que tenía desparramado el iris, el color del ojo, y la pupila, que en vez de ser redondita se estaba deformando. Así que ayer me tuvieron que operar de urgencia por segunda vez. Y ahí me durmieron con sedación y me hicieron 4 puntos más en el ojo para que no se desparrame más. ¡No sabés cómo está el ojo! Me dicen que por lo menos veo con el ojo sano. Pero no, el otro está igual", agregó.
Sensibilizado, manifestó: "Me está costando un montón. Tomás no quiso venir a cuidarme, así que estoy solo. Me trae y me lleva una amiga mía que se llama Claudia, azafata de Aerolíneas. No se queda conmigo, pero me ayuda". Ayer por la tarde mostró en Instagram que ya estaba en su casa.