La Justicia sospecha de un supuesto plan para balear la casa del intendente de Venado Tuerto, Leonel Chiarella. El dato sobre dicho plan se 'filtró' de investigaciones en curso, y obligó al Ministerio de Seguridad de Santa Fe a dotar de custodia al mandatario venadense.
La versión preliminar indica que el ataque fue impulsado desde una cárcel federal. Un preso ofreció 100.000 pesos como recompensa por el atentado contra el domicilio del titular de la Municipalidad en el mayor centro urbano del sudoeste santafesino. El instigador sería un reconocido narcotraficante de Venado Tuerto.
Hace tres semanas, Chiarella hizo un fuerte reclamo público a los jueces para “terminar con la puerta giratoria”, y nombró a casi una decena de delincuentes libres en la ciudad, con distintos antecedentes.
Críticas a la Justicia
En diálogo con LT10, Chiarella aseveró que lo que está sucediendo “deja bien visible cómo desde las cárceles operan estas bandas narco”; y planteó la necesidad de que “la Justicia se comprometa con la realidad que estamos viviendo”. “Que los jueces entiendan que tienen responsabilidades, que forman parte del problema, pero también de la solución porque deciden si un delincuente queda preso. Que se hagan cargo de esta parte de la realidad que les toca”, reclamó.
“Para nosotros las causas de la inseguridad son dos: el narcotráfico y la impunidad. Y esta tiene que ver por ejemplo con que una persona que debería estar presa, incomunicada y sin contacto con actividades ilícitas del exterior, hoy está operando desde la cárcel. Y esa impunidad lo lleva a sentirse más protegido dentro de la cárcel que fuera de ella. Esas son las cosas que no pueden seguir pasando”, exigió.
“Nosotros denunciamos con nombre y apellido porque entendemos que es parte de nuestra obligación representar a esos vecinos que tienen miedo de denunciar, ya que no hay una Justicia que dé las respuestas adecuadas”, continuó, y demandó que los jueces “vayan y escuchen a esos vecinos que viven todos los días con miedo, que caminen los barrios y vean”, porque mientras todos saben quiénes son los que roban y matan, “los delincuentes caminan como si fueran los jefes del barrio, porque saben que no les va a pasar nada”.
“Hay jueces que deciden atrás de un escritorio y que no entienden la gravedad de estos hechos. Porque gozan de privilegios económicos, de cargos y del anonimato: nadie los conoce”, remató el intendente de Venado Tuerto.