No hay casa, Unión no pudo de visitante. En La Plata, acumuló una nueva derrota, determinante en las aspiraciones finales de clasificación en la zona A de la Copa de la Liga Profesional. Un factor que se volvió un lastre para intentar pelear más arriba. En pocas palabras, la campaña se sustentó en la tarea realizada en el 15 de Abril, donde ganó siete y perdió uno.
Los números en este caso son contundentes: el Tate fuera de Santa Fe solo sumó dos puntos (el 0-0 ante Talleres y el 0-0 contra Colón). Asimismo, hizo solo dos goles en esa condición: ante Sarmiento en la caída 2-1 y con Patronato por el mismo marcador.
Está claro que la doble competencia influye, ya que el cansancio es elocuente, pero el plantel insiste en que quería esto y por eso trató de adaptarse. Sin embargo, las lesiones fueron un problema ante un grupo corto y plagado de jóvenes. Aunque según la óptica general, lo relevante es que se notaba otro tipo de actitud en casa a cuando jugaba afuera.
Hoy la excepción está en el cotejo en Bolivia ante Oriente Petrolero, que asoma como solo un ante una malaria muy marcada a nivel local.