Hay elementos básicos que afectan la conexión a internet, especialmente cuando se habla de Wifi. Esta red ayuda a cubrir una casa o apartamento, pero también tiene sus debilidades por lo que es fundamental saber ubicar el módem para sacar provecho de ella.
Hacer un buen uso del decodificador de la señal es, en gran parte, responsabilidad del usuario, que quizás por no afectar la decoración del hogar o por comodidad, lo ubica en un lugar en el que pierde fuerza la señal y por ende la conexión se ve afectada.
La ubicación del Wifi
Para entender este punto es clave comprender que el Wifi funciona mediante ondas de radio, por lo que entre más cerca se esté del módem, mejor va a ser la conexión y entre menos obstáculos tengan las ondas más fuertes va a ser esa señal.
A esto hay que sumarle que al ser una antena, debe estar ubicada a una altura considerable, es decir a 1 o 1.5 metros de altura. Ahí ya está el primer tip. No poner el decodificador en el suelo o debajo de una mesa. Pero tampoco al extremo de ponerlo al nivel del techo, porque va a encontrar una obstrucción directa.
El siguiente punto es ponerlo en un lugar estratégico. Si la idea es cubrir la casa o el apartamento, lo mejor será ponerlo en un lugar central como la sala, el comedor o el estudio, si el internet va a ser específicamente para trabajar o estudiar.
Pero de la mano de eso, debemos tener en cuenta que el módem no puede tener mayores interrupciones. Entonces no será oportuno ponerlo en esquinas, pegados a la pared, junto a una columna, guardado en un mueble, etc. Debe tener el suficiente espacio para que las ondas puedan moverse.
Además, es importante no ponerle objetos a los lados que dañen la señal. En este caso los espejos o vidrios son enemigos directos, porque hacen que las ondas reboten. Así mismo, los dispositivos electrónicos como televisores, radios u hornos microondas generan que la señal choque con la propia que generan de estos aparatos.
Todo esto último no va hacer que la conexión se caiga, sino que genera que la señal sea más débil y por ende más lenta, por lo que al alejarnos del decodificador va haber problemas para una navegación fluida.
En caso de vivir en una casa de tres pisos la mejor ubicación va a ser la segunda planta, porque va haber un equilibrio en la distribución de las ondas por más zonas de la casa. Si se pone en el primer piso, el tercero va a tener problemas y lo mismo al revés. Aunque, para este tipo de casos, siempre es recomendable optar por un repetidor para garantizar una mejor conexión en toda la casa.
Otros puntos a tener en cuenta
Con todo este panorama aclarado, vale la pena mencionar otros aspectos que son importantes a considerar para mejorar la señal de internet en las casas.
Uno es que en caso de tener un router con una antena o varias, lo mejor será ubicarlas de manera vertical. Muchos pueden creer que la solución a la navegación lenta será poner la antena apuntando directamente al dispositivo que se quiere usar, y no. La optimo es ponerlas verticales porque su señal se transmite de forma horizontal, entonces así va a haber una cobertura más amplia.
Otro punto, que es muy difícil de solucionar, es el Wifi de los vecinos. Así como la señal de nuestro internet choca con la de los dispositivos en casa, también lo hace con las de los hogares cercanos. Es un factor que es complicado de resolver, pero que vale la pena destacar.