El serbio Novak Djokovic continúa con su paso triunfal en Wimbledon, tras derrotar en cuatro sets al ruso Andrey Rublev, en el marco de los octavos de final del Grand Slam.
De esta manera, el tenista serbio logró clasificarse a sus duodécimos cuartos de final en Wimbledon, donde se enfrentará al italiano Jannik Sinner, que aún no le ha ganado en su carrera.
En declaraciones después del partido y con un tono jocoso, Djokovic se refirió a la presión que supone la actitud de sus competidores, que doblegan los esfuerzos para ganarle. "Cualquier tenista quiere estar en una posición en la que el resto de tenistas quieren ganarte. Es un privilegio. La presión es parte de nuestro deporte, sin importar cuántos Grand Slams hayas ganado o cuantos años lleves. La presión está siempre que salto a la pista, especialmente aquí, en la central de Wimbledon", expresó.
Luego, y continuando con el concepto, se atrevió a ir más allá al asegurar: "Al mismo tiempo, me motiva, me inspira a conseguir todo con lo que sueño y a jugar mi mejor tenis. Sé que quieren ganarme, pero no ha pasado aún".
Sin embargo, y en medio de las risas, sobre el final acotó un "muy humilde", para restarle dramatismo a la declaración.