La Selección argentina de rugby, Los Pumas, perdieron frente a Sudáfrica el pasado sábado donde se dio una situación que podría dejar sin Mundial a un integrante del equipo de Michael Cheika. Es que Juan Cruz Mallía fue citado a declarar por una jugada en la que golpeó a Grant Williams, quien debió dejar el campo en camilla con cuello ortopédico.
El argentino intentó tapar la patada del medio scrum sudafricano y, tras saltar buscando lograr su cometido, chocó con su cadera contra la cabeza de su rival quien cayó nocaut. Luego de la acción, los jueces revisaron la jugada y no se cobró infracción. Sin embargo, días después del partido, el argentino tendrá que declarar de manera virtual, apoyado por un abogado de la UAR.
El Comité de Revisión de Infracciones convocó al back albiceleste por haber contravenido la Ley 9.11, que indica que los jugadores no pueden hacer nada que sea considerado temerario o peligroso para otros jugadores. El Comisionado Citador revisó la jugada y concluyó que debió ser penalizada con tarjeta roja para el fullback.
Según cuenta el sitio ESPN, "Mallía debería declararse culpable y aceptar la sanción impuesta por el Comité. En caso de ser suspendido, dependiendo de la penalidad, podría estar ausente en la Copa del Mundo". El caso será considerado en primera instancia por el Comité de Revisión de Juego Sucio de la Sanzaar.
Otro punto en contra que tiene Mallía, es que ya cuenta con un antecedente similar en 2021, cuando cargó contra el galés Kieran Hardy e impactó su cabeza contra la cara del rival al intentar tackle y fue expulsado. Por esa acción, le dieron tres semanas suspensión.